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Muchas mujeres y muchos hombres en su afán de bajar de peso o de talla, llevan  a cabo conductas totalmente dañinas para su salud y que al final no les darán el resultado que desean.

1.- Si ayuno y me salto una comida, voy a quemar más grasa.

2.- Si como fruta y jugos en el desayuno estoy comiendo “sano”

3.-Si me decido hacer ejercicio 3 horas diarias, voy a bajar de peso

4.-Las pesas engordan, y si las hago me voy a poner como mi instructor que horror LLENA DE BOLAS.

5.-La dieta de la luna, de la sopa de col, la de los jugos me bajarán de peso

6.- Cuando voy al gym, sólo me como una manzana o un jugo

7.-Mi desayuno es muy completo: jugo de naranja + fruta + un café y mi bisquet.

8.-Los suplementos y licuados de proteína son anabólicos y engordan.

9.- las vitaminas engordan

10.-Primero bajo de peso y luego hago ejercicio, porque la grasa se “endurece”.

11.- Ya estoy a dieta, la voy hacer mejor de lo que la nutrióloga me dijo,  voy a quitar alimentos para bajar más rápido.

12.- Aunque me haya comido un pastel, tomaré mucho más agua para no subir.

13.-Ayer me di el atracón de mi vida, hoy tomo laxantes.

14.-Tomo diuréticos para bajar más rápido.

15.-La faja que me recomendó mi amiga me va a bajar todos mis “gorditos”.

Las personas que hacen dietas compulsivamente no conocen el sencillo deleite que es comer. Todas estas conductas y dietas son erróneas.

Lejos de ayudarnos nos ponen peor, ya que la mejor forma de bajar de peso es comiendo y saber cómo.

Debemos informarnos acerca de qué se puede comer, durante y al final de una rutina de ejercicio; así como ingerir las colaciones entre comidas, no olviden que ¡comer adelgaza!